Apuesto a que no sabías que era tan fácil.
Nuestra mirada es capaz de conquistar un mundo, por eso siempre debemos preocuparnos de que luzca impresionante. ¿Imposible? Claro que no. No es necesario gastar una fortuna ni tener que recurrir a pestañas postizas para lucir perfecta. Es sencillo, rápido y lo puedes hacer en cualquier parte. Pon atención.
1. Limpieza
Antes de empezar con tu rutina, debes asegurarte de que el ojo esté completamente limpio. Para eso puedes usar una crema humectante con algodón o directamente una crema desmaquillante. Luego de haber limpiado la zona, enjuaga con agua fría y deja que se seque.
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2. Encrespado
Una vez que tengas la zona ocular completamente limpia y despejada, comienza el proceso de encrespado. Y es que no hay nada más despampanante que unas pestañas largas y curvas. El encrespador lo puedes encontrar en las farmacias y tiendas especializadas, y hay algunos que vienen con calor para darle aún más forma a tus pestañas. Haz el proceso delicadamente cuidando no rozar la piel y manteniéndolo de 5 a 10 segundos en cada ojo.
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3. Aplicación de máscara
Primero que nada debes saber que la máscara de pestaña es algo en lo que debes invertir pues una de mala calidad puede arruinar tus pestañas.
Para aplicarla de manera correcta debes untar el pincel para que te quede una cantidad prudente de rímel, ni mucho, ni muy poco. Una vez que lo hagas, dale una primera capa a tus pestañas en dirección al término de tu ceja, es decir, en diagonal hacia arriba. Espera que se seque la primera capa y dale una segunda.
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4. Separación
Muchas veces no podemos controlar la cantidad de rímel que ponemos en nuestras pestañas, por lo que la mayoría de las veces nos quedan grumos que tienden a juntarlas, es por eso que antes de terminar el proceso es importante que vayamos separándolas con nuestros propios dedos.
5. Peinado
Una vez separadas, solo queda el toque final: el cepillado. Antes de que se seque la máscara que acabas de aplicar, utiliza el pincel del rímel sin producto para moldearlas y dejarlas exactamente como quieres.
¡Y listo! Ya tienes una mirada increíble.
Eso si, no debes olvidarte de cuidar tus pestañas diariamente. No vayas a dormir sin quitarte la máscara y aunque no te hayas aplicado nada, limpia todas las noches tus ojos para eliminar la suciedad del día con un algodón suave. También de vez en cuando puedes aplicar aceite de almendras masajeando las pestañas para hidratarlas y dejarlas fuertes, gruesas y hermosas.
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